El ámbar azul

Es el ámbar más caro en el mundo, se produce en América Central, Nicaragua, la República Dominicana  y México. Esta “piedra” es bastante rara, no sólo porque es difícil de obtener, y es porque  es un ámbar de color azul. 

En cuanto a su apariencia, colores se extienden desde el azul pálido a un profundo tono de azul.

Bajo luz artificial, el ámbar azul aparece como un ámbar ordinario, pero bajo la luz del sol toma efectos sorprendentes, como un intenso color azul fluorescente. Cuando se mantiene contra el sol tiene el aspecto del ámbar ordinario, y bajo la luz ultravioleta presenta un brillante color azul lechoso.

El ámbar azul emite un aroma agradable, que es diferente del que presenta habitualmente el ámbar del Báltico, cuando está en el proceso de elaboración de gema, en el corte y pulido.

Otra propiedad rara e inusual, que tiene el  tropical ámbar Dominicano es su fosforescencia debido a las impurezas de una resina endurecida por la lava volcánica.

Por lo tanto el producto del ámbar azul es especialmente apreciado en todo el mundo. 

Para realizar los trabajos de orfebrería con decoraciones hechas en azul con éste ámbar, se necesita de una experiencia muy alta debido a que esta resina fosilizada es la más dura y fuerte de todas las especies conocidas hasta la fecha, otra razón para que éste ámbar sea el más caro en el mercado mundial de la joyería.

Otra razón por el  interés que hay en esta “piedra” de ámbar azul Dominicano es por el alto contenido de inclusiones, este ámbar azul Dominicano tiene mucho más inclusiones que el ámbar de los países bálticos. La inclusión o las inclusiones consisten en restos de organismos vivos que una vez fueron atrapados en el ámbar en tiempos pasados. En este ámbar se han encontrado los elementos más raros conocidos en su interior como; insectos, plantas, y elementos marinos. 

No hace mucho tiempo, en Haití se encontró una inusual inclusión, una araña de 20 millones de años atrapada en una de estas resinas.

*** La palabra piedra está escrita entre comillas, porque en realidad no es una piedra, es una resina, pero en joyería se habla de piedra de ámbar...

Escrito por: Alejandro Glade R.